Tres presos de conciencia estuvieron detenidos durante periodos cortos, dos de ellos sin cargos ni juicio. Nueve posibles presos de conciencia y unos diez detenidos políticos permanecieron recluidos sin juicio hasta su liberación en los meses de julio y agosto. Una persona fue condenada a muerte. Se mantuvieron las condenas a muerte del ex presidente y tres ministros del gobierno anterior. Según informes, las fuerzas gubernamentales ejecutaron extrajudicialmente a por lo menos 170 civiles como represalia por los ataques perpetrados por grupos armados. Según los informes recibidos, grupos armados, entre ellos una patrulla de autodefensa, mataron de forma deliberada y arbitraria al menos a 120 civiles.